Alfonso VIII conquista Cuenca

CUENCA, 21 sep 1177. Con la presencia del legado pontificio, cardenal Jacino Orsini, Alfonso VIII convocó en Tarazona a los reyes de León y Aragón para coordinar una ofensiva contra los almohades y detener así los avances que habían conseguido a costa del reino de León. Para ello se eligió el saliente de Cuenca, ciudad que a los almohades cada vez les costaba más avituallar.

La ciudad, sitiada desde julio, no recibió socorro del califa Abu Yusuf, quien había regresado a África tras la campaña leonesa y que consideraba Cuenca muy difícil de mantener. La ciudad resistió hasta el 21 de septiembre, momento en el que, diezmada por el hambre y las enfermedades, se rendió al joven rey Castellano.

Una vez conquistada, Alfonso VIII, para fomentar la repoblación del lugar, otorgó un conjunto de leyes y privilegios que fueron recopilados en el Fuero de Cuenca, y cuya novedosas disposiciones, en relación a las tradicionales cartas puebla que se otorgaban hasta ahora, se repetirá ampliamente en las nuevas conquistas castellanas.

Cuenca fue conquistada el día de San Mateo, con lo que la ciudad celebra todos los septiembre las Fiestas de San Mateo con una recreación de la conquista de la fortaleza por parte de Alfonso VIII.

IMAGEN SUPEIOR: COLORACIÓN DE UN GRABADA DEL SIGLO XIX QUE CONMEMORA EL SITIO DE CUENCA.

EN PRIMER LUGAR ALFONSO VIII DE CASTILLA Y ALFONSO II DE ARAGÓN.