Fernando II de León rompe su alianza con los almohades
SANTAREM, 12 junio 1172. De forma unilateral y sin previo aviso, Fernando II de León ha roto el pacto que mantenía con los almohades y ha atacado al ejército andalusí que estaba atacando Santerém. La alianza ahora rota fue acordado con el califa Abu Yaqub Yúsuf, y en virtud del cual, hace tres años, el propio rey leonés desalojó a los portugueses de Badajoz para devolver la plaza, más Cáceres y Trujillo, a los almohades. Por entonces, el objetivo de León era evitar la expansión de Portugal a costa de León. En esta ocasión, los hechos se han desarrollado exactamente al contrario.
Una vez eliminada la resistencia del emir de Murcia Ibn-Mardanish, el califa Abu Yaqub Yúsuf reorientó su ataque hacia los reinos cristianos. Su primer objetivo ha sido recuperar la estratégica fortaleza de Santarém, Cuando Fernando II tuvo conocimiento de la campaña, acudió en ayuda de su suegro Alfonso I de Portugal y consiguió evitar la caída de la plaza en manos africanas. Esta acción estaba revestida de toda lógica política, pues la toma de Santarem hubiera supuesto una gran amenaza para el flanco leonés. Por otro lado, Fernando II de León no ha hecho más que poner en práctica lo acordado en el Tratado de Sahagún, de 1170, en virtud del cual el rey leonés, presionado por Castilla y Aragón, y ante la presión y escándalo de las jerarquías eclesiásticas, se comprometía a romper su alianza con los infieles.
La reacción en Sevilla ha sido fulminante. El califa da por rota la alianza con el rey leonés y prácticamente lo ha declarado objetivo militar inminente. Y los preparativos no se han hecho esperar; se sabe que una embajada del califa está negociando una tregua con Alfonso VIII de Castilla, a quien, por otra parte, no le faltan motivos para aceptarla, dados los ataques leoneses que Castilla ha sufrido en su frontera occidental. Por su parte, el ejército almohades está reorganizándose en Sevilla al tiemplo que empiezan a llegar refuerzos desde África.
En León son conscientes de que los almohades los tienen en su punto de mira, con lo que han empezado las negociaciones contrarreloj con el recién llegado cardenal Jacinto, legado pontificio para los reinos de Hispania, para que organice una alianza con el resto de reinos. En esos momentos la situación es muy confusa, dadas las malas relaciones que el reino leonés mantiene con sus vecinos. Pero en lo que sí coinciden todos los analistas es en que el ataque musulmán contra León es inminente.
IMAGEN SUPERIOR: CASTILLO DE SANTAREM SOBRE EL RIO TAJO
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